Junio - ¿Qué hacer para que las plantas vuelvan a crecer?
Si deseas mantener saludable tus plantas, durante este mes puedes realizar algunas tareas que les ayudarán a enfrentar heladas y lluvias. Aquí te entregamos algunas sugerencias.
Recupera los nutrientes del suelo con abono
Con el crecimiento de las plantas y el riego, el suelo va perdiendo sus nutrientes. Para devolverlos y asegurar el normal desarrollo de las especies, es necesario considerar:
• En invierno no se deben usar fertilizantes que contengan nitrógeno porque estimula el crecimiento y las plantas no lo necesitan, ya que están en reposo vegetativo.
• Prefiere los abonos orgánicos como el compost, que además mejora la estructura del suelo, aumentando su capacidad de retener el agua y prevenir su pérdida en temporada seca. El guano, en tanto, favorece el desarrollo de las raíces y mejora la calidad de flores y frutos.
• Fertiliza tus árboles y arbustos florales con Superfosfato Triple, excepto las especies acidófilas como Azaleas, Prímulas, Camelias y Rododendrones, ya que el calcio que contiene este fertilizante no les hace bien, en cambio se les puede aplicar Sulfato de Fierro.
• Para aplicar el fertilizante, excava pequeños agujeros bajo la copa de los ejemplares adultos de árboles y arbustos.
• También aplica abono en tus maceteros con plantas en flor.
No te descuides con las plagas
Habiendo terminado la caída de hojas, junio es el momento para aplicar pesticidas y/o fungicidas a las especies que cada otoño pierden sus hojas, tanto frutales como ornamentales. De esta manera podrás prevenir los daños provocados por plagas como ácaros, pulgones, conchuelas y hongos.
Podar antes de que lleguen las heladas
• La poda favorece la floración y desarrollo, controlando el crecimiento. Esto es especialmente importante en los árboles frutales, donde un crecimiento excesivo afecta la producción de flores y luego frutos, ya que la planta concentraría sus energías en crecer y no en producir. La poda correcta da fuerza y vigor, y despeja para permitir que la luz del sol llegue al centro de la planta; pero una poda mal realizada puede llegar a causar la muerte de una planta.
• En árboles leñosos que cada otoño pierden sus hojas se cortan las ramas secas, enfermas o chuecas. Los árboles ornamentales no suelen podarse, menos durante su etapa adulta.
• Haz cortes limpios y precisos, sin dejar hilachas de corteza, para prevenir enfermedades y favorecer la cicatrización.
• Evita podar muy drásticamente las ramas más recientes de árboles viejos o jóvenes, ya que ello les puede provocar cánceres vegetales que los debilitan y reducen su esperanza de vida.
• La mayoría de arbustos se podan en invierno, en especial los que florecen entre primavera y verano. Algunas especies que requieren poda son: Plumbago Arbustivo, Hortensia, Granado de flor, Rosa y Copo de nieve.
• Al podar tus rosales, elimina las ramas centrales, las que estén secas o enfermas, las más antiguas o que han dado muchas flores. Deja tres ramas principales como armazón en plantas más débiles, y cuatro o cinco ramas en los rosales más vigorosos. Realiza además un ligero despunte en las Rosas Trepadoras.
• No se podan: Buganvilias, Hibiscos, Floripondios, Gomero, Ceibo, Asclepias, Corona del Inca, Azaleas ni Camelias. Si presentan ramas secas, espera hasta que pase el tiempo de las heladas para cortarlas, ya que protegen las partes vivas de la planta. Tampoco se deben podar los Magnolios, que son de crecimiento lento y cuya floración se produce en las ramas crecidas durante el último año.
No te olvides de tus herramientas
Para podar, recuerda utilizar siempre herramientas bien afiladas y limpias, para realizar cortes precisos en las ramas sin desgarrarlas, y evitar así la entrada de agentes patógenos. Las tijeras y podadoras se afilan con una lima suave. Para ramas con grosor superior a los 10 cm está indicado el uso de las sierras de arco.
¿Cómo cuidar el pasto en invierno?
• Esta es la época en que el pasto requiere menos cuidados, pero es necesario que atiendas algunas situaciones propias de la estación.
• El pasto crece poco, por lo que lo puedes cortar cada dos o tres semanas, bien abajo para que el escaso sol llegue a la corona de las plantas y así favorecer que se reactiven. No lo cortes inmediatamente después de una lluvia.
• El riego es casi innecesario en este período, debiera ser solamente un complemento de las lluvias cuando el intervalo entre éstas se prolonga por tres semanas o más.
• Las condiciones de humedad favorecen una mayor proliferación de malezas, por lo que procura vigilar su aparición para desmalezar y hacer un barrido. En caso de que aparezcan hongos, aplica un fungicida.
• En el caso de la Dichondra, puede verse afectada por falta de drenaje del suelo y la aparición de una maleza de aspecto muy similar a esta variedad de césped, la Hydrocotyle rotundifolia. Junto con desmalezar, aplica media taza de Salitre disperso en tierra de hojas, por cada cien metros cuadrados.
• Aprovecha de resembrar las áreas más desprovistas de pasto, cubriendo las semillas con una delgada capa de tierra bien harneada.
• Después de trabajar en el pasto, elimina las esporas y restos microscópicos de hongos de tus herramientas, sumergiéndolas en una solución fungicida y luego acéitalas.
Alegra tu invierno
No solamente en el verano podemos disfrutar con la belleza de las flores, ya que mientras muchas plantas entran en un periodo de descanso en el otoño, existen variedades de plantas de floración invernal, resistentes a las bajas temperaturas. Crisantemos, Pensamientos, Azaleas, Azucenas, Violeta de Persia y Hortensia de Invierno se pueden cultivar o comprar en maceteros para decorar la casa o poner en una jardinera.
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